La dificultad que algunas personas experimentan a la hora de abrir la boca con normalidad y de manera completa se denomina trismus dental. Aunque existen varias causas que pueden explicar por qué ocurre esto, lo cierto es que depende de cada paciente, por lo que la mejor opción es acudir a un especialista para que le dé orientación y tratamientos profesionales.
Los músculos de la mandíbula que están relacionados con la masticación se pueden contraer de manera inconsciente y constante. Un paciente sin este problema puede abrir la boca entre 4 y 5 cm, pero quien padece trismus dental apenas puede abrirla entre 2 o 3 cm.
Además de no poder abrir demasiado la boca, otros síntomas se manifiestan en forma de dolor en la mandíbula, en la dificultad a la hora de hablar y, también, en ciertos problemas o dolores cuando mastican algunos alimentos.
Aunque este problema no tiene una gran repercusión en la salud en general del paciente, sí resulta molesto con la alimentación y la limpieza bucodental. La placa se acumula y eso sí puede derivar a otras enfermedades dentales como podrían ser las caries.
Los tratamientos para este problema varían según la gravedad de cada caso. Por ejemplo, a algunos pacientes se les recomienda hacer algunos ejercicios para ampliar su capacidad de movimiento, pero otros necesitan relajantes musculares para poder soportar el dolor.