La endodoncia es un tratamiento dental que se realiza para eliminar la pulpa del diente (nervio y vasos sanguíneos) y sellar el conducto pulpar. Se realiza cuando hay una infección y una consecuente inflamación y necrosis de la pulpa. Esto puede ser de origen infeccioso o traumático.
Los factores principales que pueden causar una pulpitis o lesión en la pulpa son la presencia de caries, la abrasión, erosión y desgaste de los dientes por el roce entre ellos, la forma en la que se realizan algunos tratamientos restauradores y los materiales que se utilizan en los mismos y diversos traumatismos.
Para la realización de la endodoncia es necesario anestesiar la zona en la que se va actuar. Posteriormente, se realiza un agujero en la corona del diente para poder acceder a la pulpa y extraerla y proceder a la limpieza del conducto antes de realizar la obturación y sellado del mismo. Al final de la intervención el diente quedará plenamente insensibilizado y aislado de cualquier otra parte del organismo. Se cubrirá con una corona.
Dependiendo de la pieza dental que se trate, esta tendrá uno o varios conductos radiculares. Caninos, laterales y centrales son piezas uni-radiculares; los premolares, sin embargo, pueden tener uno o dos conductos y los molares hasta cuatro.
El odóntologo será el encargado de determinar si es necesario o no hacer una endodoncia. Si tienes dudas sobre el estado de tus piezas dentales, consulta siempre con profesionales. En Clínica Dental Javier Gisbert estaremos encantados de atenderte.