Aunque muchas veces el cuidado de la boca sea uno de los grandes olvidados a nivel de salud por los más pequeños de la casa, desde que aparecen los dientes es aconsejable comenzar con el cepillado para evitar enfermedades a largo plazo. Hay que tener en cuenta que un 90% de la población llega a padecer en algún momento de su vida alguna enfermedad bucodental, por lo que una higiene correcta y las revisiones dentales apropiadas nos permitirán evitar algunos de estos problemas.
A partir de los 3 años se podrán emplear pastas de dientes en pequeñas dosis y siempre utilizando el tipo de dentífrico adecuado a la edad. Será a los cinco o seis años cuando el niño adquiera la suficiente habilidad como para lavarse los dientes de forma autónoma aunque bajo supervisión de un adulto, algo que se reducirá a partir de los 8 o 9.
¿Qué consejos podemos darles a los más pequeños?