Un diastema es un espacio mayor de lo normal entre dientes. El diastema más habitual y visible es el que hay entre incisivos centrales superiores. La situación es ver “las palas separadas”. Hoy, en Clínica Dental Javier Gisbertvamos a dedicar este post al diastema de incisivos centrales.
Causas principales
Las causas pueden ser diversas, empezando por la genética, que puede hacer que padre o madre lo tuvieran y lo hereden los hijos. Otra posibilidad es la presencia de un frenillo labial ancho, fibroso y con inserción baja, es decir entre medias de los dos dientes. Esto sería un obstáculo para que se cierre este espacio.
Otro factor podría ser la presencia de un mesiodens entre los incisivos centrales. El mesiodens es un microdiente con forma cónica o de doble cono que suele aparecer entre los incisivos centrales o detrás de ellos. En el caso de encontrarse entre los incisivos puede dejar un amplio diastema entre ambos.
Otra causa puede ser la ocasionada por un traumatismo, es decir, una caída o un golpe con desplazamiento de un incisivo o ambos.
Soluciones y tratamientos al diastema
En los diastemas causados por herencia o congénita, el tratamiento para cerrarlo es el tratamiento ortodóntico, es decir, colocación de brackets u ortodoncia invisible para recolocar los dientes y cerrar el espacio.
Cuando la causa es el frenillo o un mesiodens lo primero a realizar es la eliminación quirúrgica del obstáculo. Una vez eliminado, en algunas ocasiones, el diastema se cierra por si solo debido a la tendencia de los dientes a ir mesializándose, o lo que es lo mismo, a ir hacia delante.
Si no ocurriera esto, que es lo más habitual, habría que hacer tratamiento ortodóntico.
Cuando la causa es un traumatismo, lo indicado, en la medida de lo posible, sería tratar lo antes posible, anestesiar, reposicionar el diente y finalmente fijarlo con una ferulización para mantenerlo fijo.